sábado, 25 de enero de 2020

Triste amanecer



Amanecer de despedidas , de WhatsApps constantes y llamadas intermitentes.
Amanecer de recuerdos olvidados que se acercan a la mente y generan su prisión.
Amanecer de desconcierto, de dolor constante y sentimientos a flor de piel.
Amanecer de pesar, de apretones de manos, encogimiento de corazón y abrazos fuertes, contundentes y sinceros.
Amanecer de charlas interminables que no llevan a ningún sitio pero que llenan de paz.
Amanecer del discurrir de la vida, la amistad, los formalismos y las creencias.
Amanecer de lágrimas de dolor, de miedo y de sosiego
Amanecer de despedidas.
Amanecer de vida y amanecer de muerte.
Que descansen en paz.


©JaviHuertas2020