RABIA

         Hoy he comenzado a escribir poniendo titulo, generalmente, son la mente y el corazón, los que se abren, frente a la pantalla del ordenador y dejo volar, deslizarse o aporrear el teclado a mis dedos,  con ligereza, sin ni siquiera pensar en lo que escriben o quieren expresar
         Con el paso de los minutos, con el ritmo de la música seleccionada, las frases, las palabras y las ideas van fluyendo creando una composición que en la mayoría de las veces no me agrada, pero al ser mías, y haber traspasado hace tiempo la barrera de la vergüenza y tener bastante bien asumido, quien y como soy, les doy mi beneplácito y las cuelgo en mi blog, para el deleite, sorna, critica o aprobación, de un publico, generalmente benévolo, al tratarse de mis amigos, familiares y conocidos.
     
         Pero hoy es distinto. Hoy, después de la consecución de una serie da acontecimientos, lo que me abre el pecho y me come las entrañas a estas altas horas de la mañana es RABIA.

  

B.S.O La misión - Ennio Morricone - 

       
          Generalmente soy una persona pacifica, comprensiva a la vez que critica y condescendiente. Pero hoy no consigo hacerme con tantas buenas intenciones ante tales injusticias una y otra vez sobre los mismo tipos de personas.
       
         Mi capacidad adquirida con el paso de los años y sobre todo por la carga de intensidad emocional de los instantes actuales, a una fortísima resiliencia, junto a mi cacareada afición al "running" que tantos buenas sensaciones me crea, ha conseguido levantar una potente, fuerte y consistente barrera que por lo general no suele resquebrajarse o sentirse amenazada a las primeras de cambio o ante cualquier imprevisto y atropello,  que los tiempos actuales nos tienen acostumbrados.
 
        Pero cuando la sin razón, el egoísmo y los poderes económicos se alinean una vez mas y vuelven a sacudir mis cimientos personales, cuando la ingratitud, la soberbia el despropósito se aúnan una vez mas para hacerme daño a mi o a los míos, solo me genera RABIA.
       
         RABIA, por que maldigo a tanto incompetente que lleva las riendas de los futuros de innumerables personas de bien, que lo único que saben hacer es rendir al 100% en los puestos desempeñados. Por que son personas y trabajadores cuyo único interés era realizar su labor  lo mejor posible, rayando la perfección, para bien de la empresa donde realizasen sus empleos y, como no, para hacerse acreedores de un reconocimiento personal y respeto laboral por parte sus mas inmediatos superiores.

        RABIA, por que después de acometer de esta manera sus funciones, la contra prestación recibida, a esta honrada y eficiente dedicación es una vez mas, el desamparo, el ostracismo, y el hacer recaer sobre los hombros de estos ejemplares trabajadores, el trastorno económico ocasionado por innumerables papanatas sin escrúpulos ni moral, cuyo relevancia en la vida es el haber sabido bailar con gran presteza al ritmo que mejor a sonado en el momento de elegir fichas.

       Maldita sea, la RABIA se comienza a diluir entre las escogidas palabras que fuerzo en estas ultimas lineas, porque tras dar la pataleta, solo me queda el volver a renacer de las cenizas y proseguir con mi lucha  para conseguir salir de esta situación, que mañana recuerdo que aun sigo teniendo prácticas.

        Con la garganta desgarrada, quebrada e irritada por los gritos de despecho originados una vez mas por la iniquidad reinante y sin conseguir una lógica y ecuánime solución a esta situación, me retiro nuevamente para analizar los sinsabores que deseo de todo corazón se desvanezcan en este 2012 que esta apunto de iniciarse.